Mr. Market y el Margen de Seguridad, no son lo más importante. Es quién eres tú.
El hecho de que haya logrado:
- ser un inversor rentable en bolsa durante décadas,
- haber trabajado durante toda mi trayectoria profesional con multimillonarios muy conocidos
- y haberme jubilado joven
hace que el número de peticiones que recibo de familiares, amigos y lectores de todo el mundo para que les entrene personalmente a aprender a invertir en bolsa, sea muy alto.
No obstante, durante mis primeros 20 años como inversor en bolsa, he aceptado poquísimas solicitudes para hacerlo.
Y la razón de ello, es que yo entendí perfectamente desde muy joven la lección más importante de Benjamin Graham,
- el legendario inversor autor de “El inversor inteligente”,
- padre del Value Investing,
- y maestro y mentor de Warren Buffett, el mejor inversor de todos los tiempos.
Es una lección que cambió mi vida, que ha determinado mis resultados altamente exitosos en bolsa, y que creo que todo aspirante a ser un buen inversor debería conocer.
¿Quieres saber cuál es?.
Las lecciones más populares de El Inversor inteligente, NO son las más importantes
Cuando la gente habla de las lecciones más importantes de “El Inversor Inteligente” de Benjamin Graham, suelen hablar del Margen de Seguridad, y del comportamiento irracional de Mr. Market.
Pero estas no son ni de lejos las más importantes, en mi opinión.
De hecho, yo ya conocía y tenía aprendidas estas lecciones mucho antes de leer a Graham.
El Margen de seguridad lo aprendí durante la carrera de Ingeniería Industrial en la asignatura de Cálculo de Estructuras.
Si un puente debe soportar una carga de 100.000 Tn., no lo construyes para que soporte una carga de 100.001 Tn., sino de 500.000 Tn.. No te la juegas en las cosas importantes de esta vida apurando al máximo.
Por otro lado, el comportamiento irracional de Mr. Market (Alias “la gente toma decisiones malas en temas de dinero y negocios”), es algo que aprendí rápidamente en mi trabajo.
Al trabajar junto a estos multimillonarios, las decisiones que veía tomar al resto de empresas y directivos, me parecían malas en el mejor de los casos, y pésimas en el peor.
No en vano, el 90% de las empresas acaba cerrando, y la economía de la mayoría de las personas está en este delicado estado.
Así que cuando di con Graham y “El Inversor Inteligente”, no hice lo que hace la gran mayoría de la gente que es quedarse con las lecciones más conocidas y populares.
Si no que aprendí otras, mucho más valiosas, y que por lo que veo, muy pocos (por no decir casi nadie) conoce.
La más importante es la que te desvelo en este artículo.
Las recompensas de hacer tu propio análisis: cómo descubrí la mejor lección de Benjamin Graham
Como buen inversor, cuando descubrí a Graham hice mi propia research e investigaciones a fondo.
No tan solo leí todos sus libros, sino que exploré a fondo sobre la persona y su historia, todo lo que pude.
Lo que hallé, fue una de las lecciones más reveladoras a las que un aspirante a ser un buen inversor en bolsa, puede aspirar.
Graham fue un inversor con una rentabilidad excepcional, además de ser el maestro y mentor del mejor inversor en bolsa de todos los tiempos.
Quedaba claro desde un principio que:
- Graham dominaba de forma práctica los conocimientos para invertir con éxito en bolsa (no era un teórico/académico del tema, ni un vende-humos que tanto abundan hoy en día) y que
- Sabía transmitir sus conocimientos de forma efectiva a otros (alumnos), que a su vez conseguían excelente resultados, como fue el caso de Warren Buffett, Walter Schloss o Irving Khan.
Así las cosas, Graham lo tenía todo: El conocimiento práctico correcto, y la capacidad y habilidad de transmitirlo correctamente.
Pero todavía, me hizo falta mirar un poco más profundamente, para descubrir la lección más importante que aprendí de Benjamin Graham.
La lección más importante de Benjamín Graham: el valor del alumno
Benjamin Graham impartió clases de Value Investing durante décadas.
En la Columbia Business School, Graham impartió su Programa de Value Investing durante 37 años (desde 1928 hasta 1965).
Adicionalmente, Graham también dio clases en UCLA de Value Investing.
Con esa longevidad académica, el número de estudiantes que pasó bajo su Programa fue del orden de miles y miles lo largo de casi 4 décadas.
Y a pesar de ello, solo unos pocos tuvieron éxitos notables.
“Esto me hizo aprender la lección más importante de inversión de toda mi vida, y es que el valor del resultado obtenido en la formación de inversores, depende en gran manera del valor del alumno.”
-José Castelló
Uno puedes ser el mejor inversor/profesor del mundo, tener el mejor programa de formación e impartirlo en persona, y si el alumno es un orangután, los resultados serán nulos.
En cambio, si coges ese mismo profesor y programa y lo aplicas en alumnos que apuntan buenas actitudes y aptitudes, los resultados son excelentes.
Así que cuando alguien me contacta para que le enseñe a invertir en bolsa, lo que intento averiguar es su valor como alumno.
Intento estimar su capacidad de comprender y aplicar los conocimientos prácticos que yo tengo para obtener buenos resultados, y si no pasa este corte, lo siento, pero no puedo perder mi tiempo y esfuerzo en algo que promete unas muy bajas probabilidades de éxito.
La prueba del espejo: ¿qué te hace especial?
Durante años, he perfeccionado mi método de selección de alumnos, que es tan solo una de las muchas ventajas competitivas de la formación ejecutiva que imparto.
Actualmente, todos los candidatos/aspirantes a formar parte de mis Programas, tienen que mirarse al espejo para descubrir qué es lo que les hace especiales/diferentes del resto, y que justifiquen mi inversión de mi tiempo, esfuerzo, y conocimientos en ellos.
Esto es muy diferente a cómo funcionan la mayoría de los programas de formación del mundo, que intentan vender sus programas al máximo número de clientes.
Si esperas que te convenza para formar parte de mis Programas, puedes esperar sentado.
Yo no vendo, yo compro.
Eres tú el que tiene que haber hecho tu research, y haber determinado que mis Programas son los mejores del Mundo para ti.
Una vez hecho eso, te has tenido que autoanalizar y haber encontrado en ti las razones por las que crees que obtendrás unos buenos resultados con mis Programas, y finalmente y de manera clara y por escrito, me has de convencer de ello.
¡Es una diferencia abismal!.
Mejor 2 Leones que 40 Corderos
Ahora ya sabes por qué soy tan selectivo cuando escojo a los alumnos de mis Programas Personales.
- Estoy orientado a resultados
- Entiendo perfectamente la enorme dificultad de lo que pretendo conseguir
- Solo selecciono a los candidatos que presentan las mejores perspectivas de éxito a priori
Si alguna vez me pides que te entrene en persona, y no lo hago, ahora ya sabes mi razonamiento para ello.
Para obtener los mejores resultados, hay que trabajar con los mejores candidatos posibles.
Y esto es valido para la elección de alumnos para ser inversores, para los negocios, y para cualquier cosa importante en la vida.
Siempre es mejor estar rodeado de unos pocos leones, que de muchos corderos,
Por suerte para mí, la Comunidad Global de Alumni de José Castelló Executive Education es excelente y el nivel es muy alto.
Nunca me importó mucho su tamaño, pero nunca negocié ni un ápice su calidad.
Si quieres recibir en tu e-mail mi Training Mensual puedes empezar aquí.
La evolución del valor del alumno con el tiempo
Afortunadamente, para todos, y para hacer las cosas más interesantes, el valor de un alumno es cambiante con el tiempo.
Así que es muy importante esforzarse al máximo, y ser perseverante.
Hay alumnos que no estaban preparados cuando impartí mi Primer Programa ya hace muchos años, y ahora sí lo están.
Trabajaron en la dirección correcta durante años, y me demostraron que un NO ahora, podía convertirse en un SI más adelante en el camino.
De manera opuesta, si hay alumnos que no han aplicado efectivamente lo que les he enseñado por falta de esfuerzo y determinación, que no esperen recibir una convocatoria a mis Programas.
Y por supuesto están los alumnos que desde el primer día hasta el último, y durante años, han justificado ampliamente su valía, y la fe y el esfuerzo que he depositado en ellos.
Sus resultados extraordinarios son la razón última de todo esto, y me enorgullecen mucho.
Qué tipo de alumno seas tú ahora, y llegues a ser más adelante, depende ampliamente de ti.
Así que te recomiendo que te des un buen vistazo en el espejo, y no pares de trabajar hasta que lo te veas te satisfaga.
EJERCICIO: La prueba del Espejo
¡Ahora es tu turno!
Si te ha gustado mi artículo, cuéntame en los comentarios, que es lo que crees que te hace especial/valioso en la persecución y consecución de tu objetivo.
¿Qué haces tú que no hace el resto?.
- Si quieres ser un buen inversor en bolsa, ¿qué esfuerzos estás dispuesto a hacer que no hace la mayoría?.
- Si quieres ser un directivo de los mejor pagados del país, ¿qué sacrificios haces para conseguirlo?.
- Si quieres jubilarte joven, ¿qué haces tú que no hacen los demás que crees que te pueden dar una ventaja importante sobre el resto?.
¡Espero leerte pronto!
Hola Jose!!
Enhorabuena por el artículo! Todavía me sorprende que haya gente que “no lo vea”.
Por suerte entendí rápidamente que alguien que se había jubilado con 38 años, tendría un PLAN diferencial a lo que había leído hasta ese momento, por lo que no tardé en contactarte indicando que estaba dispuesto a hacer todo lo que me pidieras con tal de aprender al máximo de ti.
Para ser un buen inversor en bolsa, consciente de que es la parte más compleja, estoy totalmente decidido a invertir el máximo de mi tiempo y esfuerzo, cuando llegue el momento adecuado. De momento ya cuento con muchos de tus conocimientos al respecto, ya no solo del Blog, sino de tu increíble Máster en Inversión 🙂
Respecto a ser un alto directivo, de nuevo he dedicado el máximo esfuerzo que he podido, rechazando vacaciones durante todo un año, formándome constantemente, desayunando comiendo y cenando con el PC del trabajo… y cuidándome como un deportista profesional -dormir 8 horas, alimentación saludable, deporte diario… hasta el esfuerzo de recibir masajes semanales 😉 –
Respecto a jubilarme joven, entiendo que como la venta, es una mezcla de arte y ciencia por lo que seguro que me olvidaría de mencionar algo, lo que te puedo decir como ejemplo que hoy lunes me he levantado muy pronto enchufadísimo para conseguir la próxima meta que tengo.
Esto creo que viene determinado por mi CARÁCTER, que hace que tenga una AMBICIÓN muy alta de conseguir objetivos difíciles y la LÓGICA de que si no me esfuerzo más y de forma más inteligente que los demás, no llegaría nunca.
Y no he de inventar nada, sino “copiar y pegar” lo que hiciste hace +10 años porque tengo la prueba de que sigue funcionando igualmente y es algo que enseñaré a mis descendientes, porque los conocimientos correctos no caducan con los años 😉
Muchas gracias por todo, fuerte abrazo y Pura Vida!
Dani
La mejor lección de Benjamin Graham: tu valor como alumno
¡Muchas gracias Dani por tu comentario y por tus palabras!
Desde siempre he tenido clara esta crucial lección de Benjamin Graham, y he puesto especial atención en ella, desde que inicié mi Business School a la hora de seleccionar alumnos a los que entrenar en persona.
Para mi sorpresa, me di cuenta muy pronto no tan solo de que la mayoría de gente la desconoce o no la entiende, sino de que NO está dispuesta mirarse al espejo honradamente para evaluar si son capaces de dar la talla y asumir el esfuerzo que implica aprender de los mejores.
Afortunadamente para mi, y también desde el principio, di con muchos buenos alumnos cómo tú, que marcan el standard oro de lo que es un candidato que merece ser entrenado, y tus excelentes resultados están a la vista.
¡Un fuerte abrazo y Pura Vida!
Muchas gracias por la contestación y tus palabras!
Me alegro mucho de que durante todo este tiempo he cumplido con la palabra que te di hace ya varios años 😉
Nos tienes mal acostumbrados a que respondes siempre a los comentarios y lo doy por hecho, pero hoy he pensado que detienes tu apasionante vida para esto y lo mínimo que puedo hacer es agradecerlo.
Pura Vida!
Dani
La mejor lección de Benjamin Graham: tu valor como alumno
¡Un placer Dani como de costumbre!
En realidad solo aplico la misma ecuación de precio/valor que Graham nos enseñó: Precio es lo que pagas, valor es lo que recibes.
Siempre he tenido muy claro el alto coste en el que incurro cuando intento ayudar a alguien (gasto mi tiempo, mi dinero, y mis conocimientos).
Si el valor que recibo es ver cómo dicha persona, es honrada, trabajadora e inteligente, y logra mejorar sustancialmente su vida y la de los demás gracias a mi esfuerzo, y encima me lo agradece, entonces el valor justifica el precio pagado. De lo contrario, no.
¡Un fuerte abrazo y Pura Vida!
Hola José, hola todos
Admito que no soy muy bueno para venderme como un alumno excelente, ni creo que lo sea, pero a cambio todos los dias voy a avanzar sin parar hasta que consiga jubilarme a los 40 (tengo 29), quisas lo haga dando pequeños pasos y se que el camino es largo y escalpado pero GRACIAS a ti ya pude resolver lo mas difícil: saber en que dirección debo ir.
Ahora mismo se que no estoy preparado para aprovechar al 100 tus clases presenciales, pero algun dia lo estaré y esperare paciente la oportunidad, no solo de aprender de inversión y finanzas sino tambien de surf (nunca me he subido a una tabla)
Nota: ya me adapte a esperar impaciente tus correos, desde ayer estoy revisando por si te adelantabas. Jjjj
La mejor lección de Benjamin Graham: tu valor como alumno
¡Muchas gracias José Ramón por tu comentario y por tus palabras!
Estoy encantado de ver tu tesón y perseverancia, y sobretodo que has empezado ya desde muy joven (quién pillara esos 29…).
Afortunadamente tú sólo tienes que centrarte en trabajar bien, y dar lo máximo, que yo me encargo de la selección de Alumnos, y de todo lo demás.
¡Un fuerte abrazo y a seguir así!
¡Pura Vida!
Hola José,
Invertir y multiplicar mis ahorros entra en mi lista reducida de objetivos. Mi objetivo más directo és multiplicar mis resultados en mi trabajo actual. El esfuerzo requerido para construir una vida sostenible alrededor del trabajo és un esfuerzo adicional constante, y las opciones disponibles para mantener un crecimiento sostenido y un riesgo bajo son limitadas. Creo que si soy experto en algo a estas alturas, és en esfuerzo.
Para valorar la inversión en esfuerzo en una formación, para decidir si aplicar o no mis capacidades a fondo, valoro lo siguiente: duración de la misma, programa, retorno, y muy especialmente la parte social. Es decir, valoro muy positivamente la formación presencial y el contacto con una comunidad de alumnos. Adicionalmemte también el coste de la misma en relación a los puntos mencionados, y a mis posiblidades.
Si una formación me encaja dentro de los criterios que considero ajustados y sostenibles para mis possiblidades, decidiría esforzarme al máximo para conseguir mis objetivos. Si en canvio no me encaja, quizás no sería capaz de conseguirlo.
Y supongo que para decidir si apuntarme a un programa que no cubriera todos mis requisitos, pero aún así yo viera valor en ello, me esforzaría para adaptarme y encontrar mi encaje, ¡como de costumbre! Y ante la duda, para decidir, aplicaría la teoría del punto medio 😉
¡Gracias!
La mejor lección de Benjamin Graham: tu valor como alumno
¡Gracias Ferran por tu detallado y minucioso comentario!
Es tremendamente práctico que tengas un sistema “in place” para poder evaluar y valorar posibles formaciones, y que lo sigas cómo guía en tu toma de decisiones.
Mucho mejor que lo que hace una gran mayoría que se mueve por “impulsos” y quedan a expensas de técnicas de ventas y persuasión.
A seguir manteniendo el esfuerzo en la dirección correcta, y a esperar la oportunidad adecuada cuando se presente.
¡Un fuerte abrazo y Pura Vida!